Header Ads

Sevilla FC-Sporting de Gijón (0-0): El bache ya es una crisis en toda regla


Cuarto partido seguido sin ganar en LaLiga, lo que le hace perder la tercera plaza


Adiós a la tercera plaza. De momento. El Sevilla volvió a pinchar por cuarta jornada consecutiva. Y esta vez, encima, en casa y contra un rival tan débil como el Sporting de Gijón. Los de Sampaoli volvieron a dominar el encuentro pero les faltó la verticalidad y las ocasiones que han perdido en el último mes de competición. Y el problema añadido es que el Atlético de Madrid no está fallando, de modo que los de Nervión ya dormirán hoy como cuartos en la clasificación. Está claro, por tanto, que el bache ha pasado a crisis. En toda regla. Al Sevilla de Sampaoli le quedan pocas virtudes y le han aparecido muchos defectos. Afortunadamente, la cuarta plaza parece difícil que se le pueda escapar, pero está claro que el técnico argentino debe tocar muchas piezas si no quiere olvidarse de la tercer.

El Sevilla no está bien. Sólo hay que ver la primera parte que ha hecho en el día de hoy. Una continuidad de los últimos partidos, con ausencia de verticalidad, circulaciones eternas y nulo remate. El juego vistoso de Sampaoli ha desaparecido. Ni rastro de ese sometimiento con el que sorprendía no hace mucho. Y parece más culpa del propio Sevilla que de los rivales. Porque es cierto que los equipos van conociendo a los de Nervión, pero también que a éstos les falta mucho de lo que tenían antes. El desparpajo, el desborde y la velocidad de hace poco más de un mes ha desaparecido. Ahora todo es muy previsible en el Sevilla, un equipo que sigue dominando los encuentros pero sin hacer daño. Sin morder. Por eso durante los primeros 45 minutos apenas tuvo ocasiones. Tardó diez minutos en inquietar a Cuéllar, pero fue con un disparo muy débil de Nasri. Y luego no fue hasta el minuto 20 cuando tuvo que volver a parecer el portero del Sporting, esta vez por un disparo lejano de Correa. Poco más aportó el Sevilla, que sí dominó pero que pecó de colgar balones al área que no encontraron rematador. Se echó en falta más participación de Nasri. Y también de Vitolo. Ben Yedder apenas apareció. Por su parte, el cuadro asturiano se limitó a esperar atrás para intentar hacer algo a la contra. Eso sí, sólo creó peligro en la primera jugada del partido, aunque la internada por la izquierda no encontró rematador en la línea de gol, y pasada la media hora, cuando por unos instantes iba a disponer de un penalti, pero fue una equivocación más de Vicandi Garrido. La señalización del árbitro quedó en nada por fuera de juego.

En la segunda parte sí pareció salir más enchufado el Sevilla. Y, de hecho, sólo hubo que esperar tres minutos para que llegara la ocasión más clara del partido hasta el momento. Vitolo se la fabricó por la izquierda para él mismo disparar con mucha intención al palo corto, donde, esta vez sí, Cuellar se tuvo que emplear a fondo. La respuesta del Sporting tardó seis minutos, con un balón dividido que no empalmó bien Carmona. Entonces Sampaoli movió el banquillo. El argentino necesitaba cambiar la dinámica del partido y para ello hizo dos cambios de hombre por hombre, entrando Iborra y Jovetic por Kranevitter y Ben Yedder. El Sevilla buscaba un juego más directo, aunque el encuentro paró por unos instantes por otra jugada polémica. Vitolo centró desde la derecha y Amorebieta, dentro del área, despejó el balón con la mano. Fue tal el impacto, que el defensa tuvo que ser cambiado al romperse alguna articulación, pero Vicandi Garrido no señaló penalti al indicar que, en el momento del impacto, el jugador tenía la mano apoyada en el césped. Aun así, cuando se reanudó el partido, el Sevilla se lanzó a por la victoria.Tiró de carácter y orgullo para merodear más todavía la portería de Cuéllar, aunque le siguió faltando fútbol. Claridad en las ideas. Por lo que la dinámica fue la misma. Intención sin acierto, como le pasó a Nzonzi en el minuto 78, cuando se quedó solo delante del portero visitante y mandó el balón a la grada. Llegaba la recta final del partido y los dos entrenadores realizaron cambios. Sampaoli, en busca de la victoria. Rubi, para lograr amarrar un punto. Y le salió mejor al técnico del equipo astuariano, porque el marcador no se movió y el Sevilla, por tanto, acumuló su cuarto partido seguido en LaLiga sin ganar, lo que le hace bajar de la tercera a la cuarta plaza por la victoria anoche del Atlético de Madrid. Crisis preocupante de los de Nervión.

Fuente: ABC Sevilla

No hay comentarios:

Con la tecnología de Blogger.